20 de julio de 2011

Cajitas llenas

Laura guarda en una caja de acrílico roja una ilusión óptica, una sonrisa en un papel, un anhelo que no existe y un nudo enredado. Cada vez que la abre para mirar se vuelve verde, pero algo le dice que es mentira.

La cierra y es roja de nuevo como la sangre de cualquier cuadro realista que cuenta sobre una pintura en la cabeza, un tallo en el estomago, unos pinceles en la mano y un encierro en el papel.

En la cuenta de costos le faltan suministros y sensación de saciedad. El agua que no llena, corre y se pierde. Toma de la vid que le dará calor a su alma y desde allí, su hogar y lugar, brindara con el.

¿Quien sos? - le preguntaron un día al pasar. Y en un desinterés absoluto, de una forma hueca que es medio suya, entendió que ahora seria ella, con todo lo que eso le implicaría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.